Jacqueline Garcia - La Opinion
Mientras en diferentes zonas de Los Ángeles se han realizado marchas y protestas en oposición al establecimiento de albergues para desamparados, vecinas del área de Pico-Union se unieron para dar vida a un centro de recuperación para indigentes.
“Nos enteramos que necesitaban voluntarias y venimos porque nos gusta ayudar a nuestra comunidad”, dijo Irma Zamora. “Nos agrada ayudar a quien lo necesita y no nos ofendemos que lleguen desamparados a este lugar”.
La construcción del centro, que tomó tan solo seis meses, estuvo a cargo de organizaciones y voluntarios, liderados por la National Health Foundation (NHF).
“No había máquina y yo me traje la mía. No tengo carro pero pedí que me trajeran y aquí unas cortaron las telas y otras cosimos”, dijo Rivera, orgullosa de ver su trabajo en las ventanas.
Ellas dicen que están mas a gusto ahora que se ha creado este centro—localizado frente a un parque sobre la Calle 18 cerca de la Calle Union—porque antes el lugar estaba baldío y daba paso a visitas no deseadas.